La actividad física regular está asociada con una serie de beneficios para la salud, como la reducción del riesgo de enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer. Además, el ejercicio no solo mejora la salud física, sino que también tiene beneficios significativos para la salud mental. Está demostrado que el ejercicio regular reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y aumenta la energía y la concentración. Y la ventaja es que el deporte puede ser grupal, de forma que se puede promover el compañerismo y un sentido de pertenencia entre los empleados.
Para conseguir este objetivo, las empresas pueden llevar a cabo distintas estrategias que ayuden a promover la actividad física entre tus empleados:
- Concienciación y educación. Proporciona información sobre los beneficios para la salud de la actividad física regular, como la reducción del estrés, la mejora del estado de ánimo, el aumento de la energía y la prevención de enfermedades crónicas. Cuanto más comprendan los empleados los beneficios, más motivados estarán para hacer ejercicio.
- Programas de bienestar. Implementa programas de bienestar que incluyan actividades físicas, como clases grupales de ejercicio, sesiones de yoga o pilates o caminatas en grupo durante el almuerzo. Además, puedes organizar campeonatos deportivos entre tus empleados y apuntar a la compañía a carreras solidarias. Estas actividades pueden fomentar la participación y el compañerismo en la plantilla.
- Facilidades y recursos. Crea un entorno de trabajo que fomente la actividad física proporcionando instalaciones y recursos adecuados. Esto puede incluir acuerdos con empresas que propocionan un programa con acceso flexible a gimnasios, estudios, clases dirigidas, entrenamientos y apps de bienestar.
- Incentivos y recompensas. Implementa programas de incentivos y recompensas para motivar a los empleados a participar en actividades físicas. Desde premios por alcanzar ciertos objetivos de actividad física, bonificaciones por participar en programas de bienestar o la posibilidad de acumular puntos canjeables por premios.
- Apoyo y seguimiento. El apoyo continuo y seguimiento a los empleados en su viaje hacia una vida más activa es fundamental para asegurar la adherencia, la motivación y la participación. Esto puede incluir la asignación de un mentor o coach de bienestar, la organización de sesiones informativas o talleres sobre ejercicio y salud, y el seguimiento del progreso individual a través de aplicaciones o programas de seguimiento de la actividad física.
Al implementar estas estrategias, puedes ayudar a tus empleados a incorporar la actividad física como un hábito en su vida diaria, lo que no solo mejorará su salud y bienestar, sino que también puede tener un impacto positivo en su rendimiento laboral y su satisfacción en el trabajo.