TÉCNICAS QUE TE AYUDAN A GESTIONAR LAS EMOCIONES
Los tratamientos para combatir el cáncer pueden provocar distintos efectos secundarios. La fatiga, la debilidad, la caída del cabello, las náuseas y el dolor son algunos de esos efectos con los que los pacientes tienen que lidiar diariamente.
El número de efectos secundarios relacionados con las emociones no es menor, pero puede que no sean tan fáciles de detectar. La mayoría de las personas tienen que aprender a gestionar emociones como el miedo, la ansiedad y la depresión en algún momento.
Convivir con un cáncer puede ser estresante. Cuando el cuerpo está bajo estrés, libera cortisol. Esta hormona envía sangre y nutrientes al cerebro y los músculos para que puedan reaccionar ante la amenaza en cuestión. Los músculos se tensan, la respiración se acelera y el corazón late más rápido. Eso quita recursos a otros sistemas corporales importantes, incluido el sistema inmunológico.
Existen distintas técnicas que ayudarán a gestionar las emociones. Aquí te enumeramos algunas de ellas:
- Meditación: esta simple práctica milenaria. Es fácil: simplemente siéntate en silencio y respira profundamente. A veces repites una palabra o frase llamada mantra. La idea es ganar control sobre tus pensamientos y respiración para ayudarlo a relajarse.
Aunque es simple, la meditación puede ser muy útil para las personas con cáncer. La meditación de atención plena, en la que te enfocas solo en el momento presente y tu respiración, puede ayudar a aliviar el estrés, mejorar tus habilidades de afrontamiento y mejorar tu bienestar. - Respiración profunda: esta parte de la meditación también funciona por sí sola. Simplemente respira profundamente con el diafragma, mantenlo así durante unos segundos y luego déjalo salir lentamente.
La práctica diaria, durante unos minutos, pueden ayudarte a sentirte más relajado. - Relajación muscular progresiva: esta técnica relaja todo el cuerpo, un grupo muscular a la vez. Puede ayudar a las personas con cáncer a controlar los efectos secundarios como:
- Ansiedad y estrés
- Depresión
- Fatiga
- Náuseas y vómitos
- Dolor
- Problemas para dormir
También es fácil de realizar: Acuéstate en un lugar tranquilo. Tensa y relaja cada grupo de músculos. Comienza con los pies y ve subiendo por todo el cuerpo. Flexiona y relaja los dedos de los pies, pies, tobillos, piernas, piernas, vientre, pecho, dedos, brazos, hombros, cuello y cara.
Para cuando llegues a la cabeza, deberías sentirte más tranquilo y más cómodo. - Imágenes y visualizaciones guiadas: úsalas para aprovechar el poder de tu imaginación. Concéntrate en una escena agradable para alejar tu mente de los pensamientos estresantes relacionados con el cáncer o los tratamientos. Puedes crear tu propia imagen, usar un CD o video para guiarte, o trabajar con un terapeuta.
Una sesión de imágenes guiadas de 20 minutos al día puede ayudar:
- Aliviar el estrés y la ansiedad
- Disminuir la frecuencia cardíaca y la respiración
- Disminuir la presión arterial
- Mejorar tu sistema inmunológico para ayudar a tu cuerpo a recuperarse más rápidamente
- Alivia los síntomas del cáncer y los efectos secundarios del tratamiento
Cómo hacerlo:
- Siéntate o recuéstate en una habitación tranquila y cierre los ojos.
- Respira y exhala profundamente.
- Imagine una imagen relajante y agradable, como un lago con montañas en la distancia. Usa todos tus sentidos. Siente la suave brisa en tu cara. Huele el aire perfumado de flores. Escucha el viento agitar el agua. Imagine que su estrés es un pequeño bote que se aleja de la orilla y se aleja de usted. - Yoga: El yoga combina una serie de posturas de fortalecimiento, estiramiento y equilibrio con la respiración profunda.
Ayudar a las personas con cáncer a:
- Aliviar la ansiedad, la depresión y el estrés.
- Disminuir la fatiga
- Dormir mejor
- Mejorar la calidad de vida y bienestar emocional. - Tai Chi: es un antiguo arte marcial chino. Debido a que se compone de una serie de movimientos suaves combinados con respiración profunda, a veces se le llama "meditación en movimiento".
Las personas con cáncer que practican tai chi pueden notar:
- Disminución de la ansiedad y estrés
- Disminución del dolor
- Fortalecimiento del sistema inmunitario
- Mejor calidad de vida.
Ten en cuenta que estas técnicas, si bien pueden ser un complemento útil para su tratamiento contra el cáncer, no están destinados a reemplazar la quimioterapia o la radiación.